Si los delfines nos abandonan, es que algo estamos haciendo muy mal.

LA BAHIA DE LOS DELFINES


LA BAHIA

La Laguna Porras, nombre real de esta muy conocida Bahía de los Delfines, ubicada en el Archipiélago de Bocas del Toro, es un cuerpo natural de agua salada, encerrado entre bosques de manglar, isla Cristóbal y tierra firme, y conectado, por medio de diversos canales, con la Bahía de Almirante.

POBLADORES

A orillas de esta bahía habitan, en extremos opuestos, dos comunidades del pueblo originario Ngäbe: Bocatorito y Buena Esperanza, cuyos moradores se dedican a la pesca, a la agricultura y la ganadería de subsistencia. Algunas viviendas de otros residentes, se encuentran diseminadas por sus costas.

PROBLEMATICA

En la bahía existe una población de delfines nariz de botella (Tursiops truncatus), residentes en la región y amenazados por el intenso tráfico de los botes con turistas que llegan a observarlos. Hay que agregar el tránsito de otros botes que ocasionalmente se encuentran con ellos.

¡ NUESTROS DELFINES SON UNICOS !

La población de delfines de Bocas del Toro es pequeña, genéticamente única y altamente fiel a su hábitat, una combinación que los hace muy vulnerables a las actividades humanas en el área.




ESTOS MARAVILLOSOS ANIMALES NOS REGALAN SU CONTINUA PRESENCIA.
A NOSOTROS NOS CORRESPONDE PROTEGERLOS.

Los delfines viven en un mundo de poca visibilidad. Incluso, en aguas claras, está limitada a unos pocos metros.
Por eso, en los delfines, su sistema de audición ha evolucionado de forma tan sofisticada como el de los murciélagos.
El sonido es utilizado en todas sus actividades diarias como comunicación, alimentación, detección de depredadores y navegación.